Originalidad o personalización

17.01.2019

Entiendo que también existe la posibilidad de personalizar un coche clásico cuando este está pensado para el disfrute de uno mismo utilizando accesorios de su misma época acompañados de materiales nobles como la madera o el cuero

Texto: Jaime Sánchez


Aprovecho la oportunidad que me brinda este articulo para dar mi opinión respecto a los argumentos expuestos en la sección "cara a cara" del número 8 de Clásicos Populares donde Iván Vicario defiende la originalidad de un coche clásico frente a Enrique J. Fernández que se decanta por la personalización.

En mi modesta opinión los coches clásicos forman parte de la historia y la historia no se puede cambiar, por tanto deben de estar en perfecto estado de origen, de hecho todos los coches de nuestra colección excepto dos, el SEAT 600 E descapotable y el Mini Cooper , el resto, respetan rigurosamente el estado original del vehículo, además están todos ellos catalogados y matriculados como vehículos históricos, esto bajo mi punto de vista les da un valor añadido, de tal forma que cada vehículo ha tenido que pasar por la confección de un completo informe a través de un laboratorio homologado , un dictamen de la correspondiente delegación de industria y la ITV .

Todo ello en su conjunto garantiza que el vehículo se encuentra en estado de origen sin alteración alguna, motivo por el cual cuando cualquier persona lo mire o mejor dicho que lo admire, lo que realmente tiene enfrente a él es la misma imagen que veían los clientes y compradores de aquellos años 60 en los concesionarios y ferias de la época. En conclusión un coche en estado de origen es una pieza de colección que permite ser expuesto y admirado, incluso suele servir de referente para la restauración de otros ejemplares del mismo modelo, habida cuenta de que su cotización puede estar más o menos regulada.

Aún así, creo que se pueden permitir ciertas licencias a la hora de personalizar un vehículo clásico a gusto de sus propietarios sin que ello impliqué necesariamente un desprestigio para el coche, otras cuestión sería la depreciación económica respecto a un mismo ejemplar en estado de origen, depreciación que sus propietarios deben asumir por el simple hecho de modificar parte de su estética respecto a su estado original, aunque personalmente no creo que este último punto preocupe excesivamente a la gran mayoría de propietarios que abordan una restauración personalizada dada la gran ilusión y entusiasmo que uno deposita en la personalización de su coche clásico.

Henry Royce, cofundador de Rolls Royce decía " La calidad permanece mucho después de haber olvidado el precio", creo que con esta frase está todo dicho.

Quisiera puntualizar que cuando me refiero a "permitir una serie de licencias" me estoy refiriendo a utilizar accesorios de su misma época acompañados de materiales nobles como la madera o el cuero, francamente no me puedo imaginar un SEAT 1400 del 53 con llantas de aluminio, baquetas de competición y alerones.

Así pues entiendo que también existe la posibilidad de personalizar un coche clásico cuando este está pensado para el disfrute de uno mismo o como en el caso que nos ocupa para el disfrute familiar. Es este último punto sin lugar a dudas un concepto muy distinto al hecho de tener un coche clásico original de colección que apenas sale del garaje y que cuando sale lo hace con las mejores condiciones posible, por supuesto que no llueva, que no haga ni excesivo frío ni excesivo calor, que haya poco tráfico, tener asegurado un buen aparcamiento en el punto de destino, etc., etc.

El resultado final bajo mi punto de vista es que se trata de un coche de capricho, hecho a medida y a gusto de sus propietarios, es decir "un clásico para el ocio"

Seat 600E descapotable, el único de la colección Seat que no esta de origen, sino personalizado para el ocio