Seat Toledo Podium

SEAT Toledo

A pesar de la aparente simplicidad de esta unidad, esta esconde un encanto especial que lo eleva a la categoría de objeto de colección. A simple vista parece un SEAT Toledo normal, pero este modelo guarda un secreto que lo distingue y lo convierte en una pieza única y exclusiva.

Barcelona 92'

Para comprender plenamente la relevancia de este coche, es esencial retroceder en el tiempo y sumergirse en la vibrante atmósfera de la Barcelona de 1992, la ciudad que acogió los Juegos Olímpicos. En ese escenario lleno de logros deportivos, SEAT emergió como el patrocinador oficial de este evento de alcance mundial. La marca contribuyó no solo proporcionando los vehículos en los que equipos y atletas se desplazaban, sino también presentando innovaciones revolucionarias, como el Seat Toledo eléctrico, que marcó un hito en el mundo del motor.

En un gesto de distinción, SEAT creó una edición especial conocida como Seat Toledo Podium. Este exclusivo automóvil que procedía del Seat Toledo Exclusive presentado anteriormente en el salón del automóvil de ginebra, el Seat Toledo Podium monta un motor 2000 así como unos acabados especiales para esa versión que se reservó exclusivamente para los atletas Españoles que obtuvieran una medalla olímpica. 

Te lo tenias que ganar

Convertirse en dueño de este vehículo no era simplemente cuestión de compra, sino de mérito, trabajo, sacrificio y logro deportivo. En total, se produjeron 23 unidades: una por cada medalla olímpica conseguida por España, más una unidad extra guardada con reverencia en la Nave A122 de Seat Históricos. 

El Seat Toledo Podium no solo simboliza la excelencia en el rendimiento deportivo, sino que también se erige como un tesoro raro e inalcanzable, enriqueciendo la historia del automovilismo con su legado único.

En el exterior

La distinción del Seat Toledo Podium se revela a primera vista destacando la pintura gris Marengo bitono que adorna su carrocería con una sofisticación única. Las llantas de aleación de 15 pulgadas complementan este estilo refinado, aportando un toque de deportividad sin perder la esencia de la exclusividad. 

En la parte posterior del umbral inferior, de manera discreta pero significativa, reposa el logo "Podium", un sello que simboliza la hazaña olímpica y la excelencia deportiva. Este distintivo detalle añade un toque de exclusividad, recordando con orgullo la conexión única de este vehículo con los logros y la gloria olímpica. 

Sus detalles

Pero la singularidad no termina aquí. En una época en la que la tecnología avanzaba a pasos agigantados, este vehículo incorpora unos extras inusuales para su tiempo. Cada automóvil equipado con un teléfono integrado todo un lujo poco común en aquella era además de unos acabados de madera en el interior, volante de madera y unos asientos de piel beig, proporcionan un toque de elegancia y distinción, destacando la atención al detalle que lo caracteriza. Pero, la verdadera sorpresa aguardaba en el maletero, donde un fax se esconde en el, una característica futurista que deja boquiabiertos a aquellos que se encuentran con este coche único. 

Esta combinación de elementos poco convencionales le otorga un lugar especial en la historia del automóvil, convirtiéndolo en mucho más que un simple medio de transporte: es una obra maestra que fusiona exclusividad, tecnología y elegancia en una experiencia de conducción única.